Iluminando los secretos de una larga vida

Los ritmos circadianos solían ser sólo una curiosidad o un inconveniente al volar a través de zonas horarias. Pero ahora sabemos que los ciclos diarios sólidos en casi todas las funciones de nuestro cuerpo son esenciales para una buena salud. Cuando nuestros ritmos circadianos se ven alterados por el uso de luces LED ricas en azul durante la noche y una luz rica en azul insuficiente durante el día, aumenta el riesgo de sufrir trastornos del sueño, obesidad, diabetes, enfermedades cardíacas, así como cáncer de mama y cánceres con sensibilidad endócrina.

Se sabe desde hace mucho tiempo que la esperanza de vida se acorta en las moscas de la fruta y los roedores cuando sus ritmos circadianos se alteran en experimentos repetidos sobre el desfase horario. Pero ¿qué pasa con los humanos?

Ahora, varios estudios a gran escala, algunos con más de 80,000 personas con una edad promedio de 60 años, han demostrado que la alteración de los ritmos circadianos reduce drásticamente la esperanza de vida humana. Estos estudios registraron a cuánta luz solar estaba expuesta cada persona diariamente, cuánta luz había en su dormitorio por la noche y qué tan regular era el horario de su sueño. Luego, durante más de siete años, los investigadores rastrearon cuántas personas murieron en cada grupo y por qué causas.

Los efectos sobre la longevidad fueron enormes:

1. Las personas que permanecieron en el interior con niveles de iluminación tenue y rara vez se aventuraron afuera a la luz del sol brillante murieron a un ritmo un 30 por ciento mayor que aquellos expuestos a la mayor cantidad de luz solar diaria. Aunque hubo más cánceres de piel, la mayor esperanza de vida de aquellos expuestos a más luz solar superó cualquier mayor riesgo de cáncer de piel. El efecto de permanecer en el interior y evitar la luz del sol fue tan grande como el mayor riesgo de muerte prematura en las personas que fumaban. Otros estudios muestran que la luz del sol de la mañana tiene el mayor beneficio.
2. Las personas que dormían con las luces encendidas en su dormitorio por la noche morían a un ritmo un 30 por ciento más rápido, en comparación con aquellos que dormían en la oscuridad total. Y las muertes por enfermedades cardiovasculares (ataques cardíacos) y metabólicas (diabetes) aumentaron en un 40 por ciento.

Y el tercer estudio publicado recientemente en Sleep mostró el mayor efecto.

1. Las personas que duermen a horas irregulares mueren mucho antes que las que duermen en un horario nocturno regular. Aquellos que dormían en un horario regular tenían hasta un 48 por ciento menos de riesgo de muerte prematura por todas las causas y hasta un 57 por ciento menos de riesgo de muerte prematura por enfermedades cardíacas y metabólicas. De hecho, la regularidad del sueño tuvo un efecto mucho mayor que la cantidad de horas que dormían las personas.

Si sigues los tres comportamientos saludables (maximizar el tiempo al aire libre, especialmente por las mañanas, dormir en la oscuridad y seguir un horario de sueño exactamente regular), ¿vivirás para siempre? Por supuesto que no, porque hay mucha superposición entre estos tres comportamientos. Pero señalan lo esencial de un estilo de vida saludable.

El tema común es que los tres comportamientos conducen a ritmos circadianos robustos estrechamente vinculados al ciclo natural día-noche de 24 horas.

Mientras esperamos los avances en iluminación circadiana que se esperan este año, que proporcionan una luz interior rica en azul durante el día y cero luz azul por la tarde, hay mucho que puedes hacer para mejorar tus posibilidades de vivir una vida larga y saludable.