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Verificado por Psychology Today

Los sueños

Los sueños son más reales de lo que pensábamos

La realidad despiertos y los sueños tienen versiones diferentes de la misma cosa.

Los puntos clave

  • Las similitudes entre los sueños y la vida cotidiana proporcionan pistas sobre cómo funciona nuestra conciencia.
  • Durante los sueños experimentamos la capacidad de la mente para convertir la información pura en una realidad multidimensional dinámica.
  • Durante los sueños y las horas de vigilia en realidad creamos espacio y tiempo, no solo operamos dentro de él como un personaje en un videojuego.

La creciente evidencia científica apunta a una conclusión asombrosa sobre un fenómeno familiar, cotidiano (o de todas las noches): los sueños.

Source: Imagen por Adike en Wallpaperflare
Durante los sueños experimentamos una ocurrencia impresionante: la capacidad de convertir la información pura en una realidad multidimensional dinámica
Source: Imagen por Adike en Wallpaperflare

Los secretos que los sueños pueden desbloquear derivan en última instancia del hecho básico de que la realidad es un proceso que nos involucra― como un observador consciente. Asumimos que el mundo cotidiano está "allá fuera" en un sentido más real o independiente que el mundo de nuestros sueños, que jugamos un papel menor en su apariencia. Sin embargo, estudios recientes muestran que la realidad cotidiana es tan dependiente del observador como lo son los sueños.

Como se explica en el libro El Gran Diseño Biocéntrico, todo lo que experimentamos es simplemente un torbellino de información que ocurre en nuestras cabezas. De hecho, el espacio y el tiempo no son objetos físicos reales, sino más bien términos que designan las herramientas que nuestra mente utiliza para reunir información. Están entre las claves más críticas de la conciencia, y explican por qué, los experimentos con partículas y las propiedades de la materia misma, siempre son relativas al observador, en lugar de ser absolutos objetivos e independientes.

Los sueños y la realidad cotidiana son el mismo proceso

A medida que avanzamos en nuestras vidas, damos por sentado la forma en que nuestras mentes juntan todo porque el proceso es sin esfuerzo, y sus mecanismos subyacentes están incorporados, ocultos y automáticos. Pero es posible que no hayas sospechado que este mismo proceso de modelar una realidad 3-D aparentemente externa es el que subyace a los sueños. Dado que los reinos de los sueños y la percepción despierta generalmente se clasifican por separado, con solo uno de ellos considerado como "real", rara vez son parte de la misma discusión. Pero hay puntos en común interesantes que nos dan pistas sobre cómo opera nuestra conciencia. Ya sea despiertos o soñando, estamos experimentando el mismo proceso, incluso si produce realidades cualitativamente diferentes. Durante los sueños y las horas de vigilia, nuestras mentes colapsan las ondas de probabilidad para generar una realidad física que se completa con un cuerpo funcional. El resultado de esta magnífica orquestación es nuestra capacidad interminable de experimentar sensaciones en un mundo de cuatro dimensiones.

La génesis del reino de los sueños comienza con el simple hecho de que todos los organismos duermen. El sueño consiste en períodos con sueños, llamados sueño MOR, y también de períodos sin sueños, no MOR. Cuando despertamos a menudo recordamos nuestros sueños, pero no tenemos recuerdos de lo que estaba pasando durante el período de sueño no MOR. Esto se debe a que, durante un período no MOR, el paquete de onda está tan extendido que la mayoría de sus ramas están desacopladas entre sí, sin interacciones o entrelazamientos entre ellas. Al despertar, te encuentras en una de esas ramas, experimentando tu mundo familiar. Sin embargo, durante los sueños las ramas de la función de onda expansiva no son totalmente independientes y desacopladas; una vez de vuelta en la realidad de consenso, entonces, la memoria tiene acceso a esas otras ramas, mundos.

Todos hemos tenido la experiencia de despertar de un sueño que parecía tan real como la vida cotidiana, incluso si las vistas y experiencias eran completamente desconocidas para nuestro yo despierto. Recuerdo uno, mirando hacia un puerto lleno de gente en primer plano. Más allá, había barcos en batalla. Mi mente de alguna manera había creado esta experiencia espaciotemporal a partir de información electroquímica. Incluso podía sentir los guijarros bajo mis pies, fusionando este mundo 3D con mis sensaciones "internas". La vida tal como la conocemos está definida por esta lógica espacio-temporal, que nos atrapa en el universo con el que estamos familiarizados. Como en mi sueño, los resultados experimentales de la teoría cuántica confirman que las propiedades de las partículas en el mundo "real" también están determinadas por el observador.

Descartamos los sueños porque terminan cuando despertamos. Sin embargo, la duración de la experiencia es una mala razón para disminuirla. Ciertamente, no creemos que nuestra experiencia de la vida cotidiana sea menos real porque termina cuando morimos. Es cierto que no recordamos los eventos en nuestros sueños tan bien como los que ocurren en horas de vigilia, pero que los pacientes de Alzheimer puedan tener poca memoria de los eventos no significa que su experiencia sea menos real.

Convertir la información en un tapiz multidimensional

Los sueños son mucho más que el disparo espontáneo y aleatorio de neuronas que algunos insisten que son. También deben ser mucho más que la activación de recuerdos aleatorios ya contenidos en el neurocircuito del cerebro. Es cierto que los sueños a menudo contienen una mezcla de emociones y cosas que hemos experimentado anteriormente, pero en los sueños, a menudo hay personas, caras e interacciones que el soñador nunca ha experimentado antes. Un sueño es una narrativa instantánea y continua que a menudo parece tan real como la vida real misma. ¿Cómo podría este tapiz de interacciones y escenarios enormemente complejos ser el resultado de nada más que descargas eléctricas aleatorias? En los sueños, no solo estamos viendo un "mundo externo" e imprimiendo pasivamente recuerdos en nuestros circuitos neuronales. ¿Cómo es posible que el cerebro haga esto? ¿Cómo se fabrican todos los componentes de la experiencia desde cero? Mientras soñamos, no estamos observando eventos y percibiendo estímulos. Estamos en la cama, dormidos, sin embargo, nuestras mentes son capaces de crear personas y entornos nuevos sin problemas y hacer que todos interactúen sin esfuerzo en cuatro dimensiones. Estamos presenciando una ocurrencia impresionante: la capacidad de la mente para convertir la información pura en una realidad multidimensional dinámica. En realidad estás creando espacio y tiempo, no solo operando dentro de él como un personaje en un videojuego.

Si bien es más fácil apreciar la asombrosa naturaleza de este proceso cuando se trata de los sueños, es el mismo proceso que se aplica a nuestras vidas no soñadas. Según el biocentrismo, siempre estamos no solo observando sino creando la realidad.

Y, como en la vida "real", en los sueños, el colapso de las ondas de probabilidad es un componente crítico de las realidades multidimensionales que la mente crea. Colapsamos las ondas de probabilidad en nuestros sueños tal como lo hacemos cuando estamos despiertos. Sin embargo, en los sueños el cerebro tiene menos limitaciones, ya que no necesita obedecer las entradas sensoriales que en sí mismas están limitadas por las leyes físicas, y por lo tanto la mente puede generar experiencias a diferencia del mundo de consenso del que somos conscientes durante el día.

Los observadores definen la estructura de la realidad

Ahora, una nueva investigación, por el físico teórico Dmitriy Podolskiy, en colaboración con el autor, y Andrei Barvinsky (uno de los principales teóricos del mundo en gravedad cuántica y cosmología cuántica) ha revelado algo notable: que la presencia de redes extendidas de observadores define la estructura de la realidad física y del espacio-tiempo mismo. En los sueños, dejamos el universo de consenso y podemos experimentar un modelo cognitivo alternativo de la realidad, muy diferente del compartido por otros observadores mientras estamos despiertos. En los sueños, la fina estructura de la función de onda del universo que nos rodea está deslocalizada y, por lo tanto, en gran medida inestable. Esto explica por qué a menudo tienes más poder mientras sueñas; los valores de los observables que representan la base de la realidad son más fluidos. Como también se explica en el nuevo documento, la presencia o ausencia de observadores influye en la misma dimensionalidad del universo.

El biocentrismo dice que el espacio y el tiempo son herramientas de la mente, y los sueños parecen ser solo una prueba más de la verdad de esta afirmación. Si el espacio y el tiempo fueran realmente externos y físicos como se cree popularmente, entonces ¿cómo sería posible crear algo absolutamente indistinguible de ellos dentro de los confines del cerebro soñado? Pensamos que nuestras experiencias nocturnas son solo sueños y que no son reales. Pero los sueños y lo que percibimos como realidad son básicamente de la misma naturaleza. Siguiendo las implicaciones de la mecánica cuántica de una manera imparcial, llegamos a la unificación de la realidad cotidiana y los sueños. Y los rompecabezas persistentes con respecto a la naturaleza de los sueños, la realidad y nuestras propias vidas, todos se desvanecen.

A version of this article originally appeared in Inglés.

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Acerca de
Robert Lanza M.D.

Robert Lanza, Médico, es actualmente Director Científico en el Astellas Institute for Regenerative Medicine y profesor adjunto en la Escuela de Medicina de la Universidad Wake Forest.

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