El amor quiere fluir

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A principios de los 20, pasé por Rolfing, una forma de trabajo corporal de tejido profundo, y anticipé nerviosamente la quinta sesión, la que se adentra profundamente en el vientre. Pero en lugar de montones de dolor emocional reprimido, lo que se derramó fue amor, oleadas y oleadas de amor que había rechazado debido a la vergüenza, los miedos a la cercanía y mis luchas con mi madre.

Dejar que el amor fluya libremente

Se sintió fantástico dejar que el amor fluyera libremente. La compasión, la empatía, la bondad, el gusto, el afecto, la cooperación y el altruismo están en nuestra naturaleza, entretejidos en el tejido del ADN humano, la especie más social y amorosa del planeta. El amor es una corriente natural que surge dentro de todos nosotros. No necesita ser empujado o bombeado; necesita ser liberado. Si se embotella el amor auténtico en cualquiera de sus formas, duele. Por ejemplo, uno de los mayores dolores es la contribución frustrada.

¿Algún aspecto de tu propio amor ha dejado de fluir libremente?

Además de sentirse bien por derecho propio, abrirse al amor cura las heridas psicológicas, desarrolla la resiliencia y apoya el crecimiento personal. En tu cerebro, el amor calma la respuesta al estrés y reduce la activación en los circuitos neuronales del dolor físico y emocional. Nutre el comportamiento moral y te ayuda a evitar conflictos innecesarios con los demás. Y cultivar un corazón amoroso es fundamental para la práctica espiritual en todas las tradiciones.

La práctica

Comienza con la experiencia del amor en cualquier forma, como el cuidado, la buena voluntad, la amabilidad, el apoyo, el aprecio, ver lo bueno en los demás, la compasión, la bondad o el cariño. ¿Puedes ablandarte y abrirte a esta experiencia? En una relación en particular o en general, ¿puedes hacer espacio en tu cuerpo y mente para el amor?

Es doloroso sentir amor porque despierta viejos anhelos frustrados...entonces ¿bajas el amor para suprimir los anhelos? Si es así, esto es comprensible y común. Trata de ayudarte a ti mismo dejando que los anhelos fluyan también, de modo que se alivien y liberen gradualmente. Mientras tanto, devuelve la conciencia al amor mismo, que te elevará y te protegerá. Sorprendentemente, entrando o saliendo, el amor es amor; las heridas de no recibir amor a menudo se calman e incluso se curan al dar amor.

A veces las personas se sienten abrumadas cuando se conectan con los demás con amor. Sentir repetidamente tu respiración y tu cuerpo puede ayudarte a sentirte estable como "yo" mientras te abres al "nosotros". Mira lo que es sentirse amados y centrado en tu propia fuerza, respetando y defendiendo tus propias necesidades; las cercas hacen buenos vecinos.

Dado que el cerebro sintoniza gradualmente a lo que está acostumbrado, intenta ver a los demás nuevamente, tomándote al menos unos segundos para reconocer al ser detrás de los ojos. Por ejemplo, imaginaré a otra persona riéndose con amigos, o sintiéndose herida, o como un niño pequeño.

Nadie puede impedirte amar. Una vez tuve un problema de relación difícil, y finalmente me di cuenta de que simplemente podía amar a esta persona, incluso si el amor necesitaba ser principalmente, si no del todo, interno para mí. No por casualidad, comencé a sentirme mejor en la relación y, con el tiempo, la otra persona se sintió más cómoda conmigo.

Puedes ofrecer tu compasión y buenos deseos, incluso si no hay nada que puedas hacer para mejorar la situación. Tu amor sigue siendo sincero y sigue importando. Lo que los demás hagan con tu amor depende de ellos, no de ti. Lo único que puedes hacer es ofrecerlo. Puedes amar incluso cuando te desconectas de los enredos pegajosos, deseándole lo mejor a la gente incluso si necesitas alejarte de ellos.

El amor proviene de la libertad interior en la que no estás controlado por reacciones negativas. También conduce a una mayor libertad en tu mente, relaciones y mundo. El amor es una especie de solvente que disuelve gradualmente los nudos neuróticos dentro de tu cabeza. En contacto con el amor, te sientes menos vulnerable y tienes más espacio para respirar, hablar y actuar con los demás. Y, caminando por el mundo, ya sea por una calle concurrida o en el bosque, como enemigo de nadie, sin dar a los demás motivos para temerte, con buenos deseos y amabilidad en tu corazón y rostro, sientes más ganas de entrar libremente en el hoy y en el mañana.