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Verificado por Psychology Today

Dieta

La inflamación envejece tu cerebro

La “inflamagación” puede ser un factor de riesgo para la salud del cerebro.

Los puntos clave

  • Al envejecer, tendemos a experimentar un aumento de la inflamación de bajo grado en todo el cuerpo, también llamada “inflamagación”.
  • La inflamagación puede afectar negativamente la salud del cerebro, incluido un mayor riesgo de Alzheimer y demencia.
  • Elegir una dieta rica en alimentos enteros, mínimamente procesados y diversas plantas puede ayudar a combatir la inflamación.
  • La actividad física regular puede ayudar a combatir la inflamación en nuestro cerebro y cuerpo.
Source: Zohan Ali/Pexels
Source: Zohan Ali/Pexels

A medida que envejecemos, tendemos a experimentar un aumento de la inflamación de bajo grado en todo el cuerpo. Este proceso se conoce como “inflamagación” y se cree que representa un factor de riesgo significativo para afecciones como enfermedades cardíacas, cánceres, diabetes, pérdida de masa muscular y trastornos cerebrales como la demencia y la depresión.

Hay varias formas potenciales en las que se puede desarrollar inflamagación en el cuerpo, que van desde una infección viral crónica hasta una dieta de mala calidad. En personas que viven más de 100 años, se ha observado que la inflamación puede compensarse con procesos antiinflamatorios. En particular, también se propone que esta capacidad para equilibrar los cambios inflamatorios a medida que envejecemos influye en el riesgo de enfermedad de Alzheimer.

En lo que respecta a los detalles de cómo la inflamagación afecta el cerebro, un área clave de enfoque son las células inmunes del cerebro llamadas microglia. La microglia tiene la tarea de responder a una amplia gama de amenazas en nuestros cerebros. La inflamagación que existe fuera del cerebro puede ser detectada dentro del cerebro por células microgliales que luego amplifican esta señal, produciendo inflamación cerebral. Es importante tener en cuenta que las células microgliales desempeñan una serie de funciones en el cerebro y pueden producir moléculas pro o antiinflamatorias según las señales que reciben. Sin embargo, algunos datos sugieren que la microglía en el cerebro envejecido puede producir preferentemente señales que son más proinflamatorias, lo que lleva a efectos dañinos para el cerebro.

Con un mayor porcentaje de la población entrando en edades más avanzadas acompañado de un mayor riesgo de problemas de salud relacionados con la edad, la inflamagación se vuelve cada vez más relevante. Esto parece especialmente cierto cuando observamos el aumento de las tasas de enfermedades cerebrales relacionadas con la edad, como el Alzheimer, que pueden tener sus raíces en la inflamagación. Desde la perspectiva del estilo de vida, ¿qué podemos hacer para ayudar a compensar este riesgo?

1. Evita la dieta americana estándar y prioriza las fuentes de alimentos integrales de fibra y nutrientes vegetales

Se han propuesto varias estrategias dietéticas para ayudar a amortiguar los efectos potenciales de la inflamación crónica en el cuerpo y el cerebro. Un consenso parece ser que vale la pena evitar el suministro constante de calorías ultraprocesadas que caracteriza la dieta americana estándar (o la dieta de patrón occidental). En su lugar, algunos recomiendan la restricción calórica, aunque en la práctica esto puede ser difícil de implementar. Otra investigación sugiere que los alimentos vegetales ricos en fitonutrientes (como la curcumina, las antocianinas, los flavanoles y los polifenoles del aceite de oliva) pueden tener efectos beneficiosos sobre las vías inflamatorias. Además, comer fibra dietética adecuada puede ayudar a mitigar ciertos aspectos de la inflamación relacionada con la edad. Finalmente, se observa que la dieta mediterránea, que es rica en fitonutrientes, fibra y grasas saludables, proporciona una compensación potencial para las vías inflamatorias.

2. Dale prioridad al movimiento diario

El ejercicio es quizás la intervención para estimular el cerebro mejor establecida, con evidencia preclínica y clínica que converge en mecanismos y resultados clave. Al mejorar los niveles de moléculas que promueven la neuroplasticidad como BDNF, ayudar a equilibrar las respuestas inmunitarias, mejorar la salud metabólica y más, la actividad física puede representar una herramienta de intervención importante para aquellos que buscan compensar los efectos de la inflamación cerebral relacionada con la edad. Un trabajo reciente propone que el ejercicio puede representar una forma de inhibir el exceso de activación cerebral a través de los efectos sobre las células microgliales y, en investigaciones con animales, el ejercicio evitó la activación de las células microgliales relacionada con la edad.

A version of this article originally appeared in Inglés.

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Acerca de
Austin Perlmutter M.D.

Austin Perlmutter, Médico., está acreditado como especialista en medicina interna y co autor de Brain Wash.

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