"Debí de haber tenido más sexo antes de quedarme con un solo hombre"

Dos caminos divergían en un bosque amarillo, y lo siento no podía ir por ambos... Sin embargo, sabiendo cómo el camino conduce al camino, dudé si alguna vez debería volver".- Robert Frost

"El mayor pesar en mi vida es que me acosté con tantos extraños. Los ligues de una noche son siempre tan **** y sin embargo yo siempre lo hacía".- Jane

"El mayor pesar de mi vida es que debería haber tenido más sexo antes de quedarme con un chico".- Janet

Nuestras vidas amorosas están llenas de remordimientos románticos, que van desde nuestras elecciones de parejas inadecuadas a oportunidades perdidas para establecer un vínculo romántico de calidad. ¿Tienen esos remordimientos un valor funcional y debemos perseguirlos?

Hay dos tipos principales de arrepentimiento: lamentar una acción que tomamos y lamentar una acción que no tomamos. A corto plazo, tendemos a lamentar las acciones que tomamos en el pasado, y a largo plazo, lamentamos perder oportunidades. Se deduce, por lo tanto, que a la "mañana siguiente", la gente a menudo se arrepiente de las aventuras casuales de una noche, pero cuando mira hacia atrás en sus vidas, se arrepiente de perder oportunidades que podrían haberse convertido en un gran amor. Hay una gran diferencia entre estos tipos de arrepentimiento: mientras que las acciones equivocadas pueden ser corregidas y compensadas, las oportunidades perdidas ya no se pueden cumplir y, por lo tanto, el arrepentimiento perdura por más tiempo.

Los remordimientos románticos son comunes en casi todo el mundo, pero son más frecuentes en las mujeres y en aquellas que no están en relaciones. Cuando las mujeres se arrepienten, se centran más en las relaciones personales, mientras que los hombres se arrepienten de las decisiones que hicieron o no hicieron en su carrera. Dicho esto, las diferencias de género han disminuido en nuestra época.

¿Cuál es el arrepentimiento más grande en tu vida?

Cuando se les preguntó a las mujeres, "¿cuál es el arrepentimiento más grande en su vida?", lamentaron vivamente las acciones que tomaron por error y las acciones que se perdieron:

"Me divorcié del padre de mis hijos”.

"Casarme cuando tenía sentimientos más fuertes por otra persona”.

"Lamento haberme casado demasiado pronto, me divorcié demasiado pronto, me casé con un hombre inadecuado, no me divorcié de este hombre cuando quise, y la mayoría de los hombres con los que salía no eran adecuados para mí”.

"Entrar en una relación con alguien por quien no tenía sentimientos románticos porque estaba sola y en un lugar emocionalmente difícil . Nunca, nunca, NUNCA volveré a hacer eso”.

"Amo a mi novio y quiero pasar el resto de mi vida con él. Sin embargo, lamento no salir o haber tenido más sexo antes de entrar en una relación comprometida”.

"Estar con un tipo que se duchaba una vez a la semana y siempre olía mal”.

"Ser demasiado tímida”.

"No haber conocido antes a mi amado”.

"No continué una relación con un hombre que me amaba mucho (no me sentía atraída sexualmente por él)”.

"Solo lamento haberme casado con mi marido cuando él me molesta”.

"Estuve con un hombre tacaño demasiado tiempo”.

"Perseguir a un tipo que obviamente no me quería y me trató como basura”.

"Tuve dos relaciones en las que los arrastré a pesar de que sabía que no los quería; vi banderas rojas, pero aún así traté de hacer que funcionara”.

"No ser lo suficientemente egoísta; no hablar de mis necesidades”.

"No invertí suficiente esfuerzo en encontrar a alguien adecuado”.

"Yo era demasiado obediente con mis padres y no continuaba las relaciones que acababa de comenzar que ellos no aprobaban”.

¿Todos tenemos remordimientos?

"Remordimientos, tuve algunos, pero de nuevo, demasiado pocos para mencionarlos... Lo hice a mi manera".- Frank Sinatra

"No, no me arrepiento de nada, ni de lo bueno que me han dado, ni de lo malo, me da lo mismo. Está pagado, hecho, olvidado. No me importa el pasado".- Edith Piaf

"No tengo remordimientos románticos, ya que siempre salí con mujeres que estaban mal para mí".- Noam

En su cumpleaños número 75, la actriz Brigitte Bardot declaró que no lamentaba nada. Este es un punto de vista común que a menudo escuchamos expresado en la afirmación: "si pudiera volver y hacerlo todo de nuevo, no cambiaría nada”. Sin embargo, aunque muchas personas se jactan de su falta de remordimientos, pocos de nosotros nunca experimentamos remordimientos (Davidai y Gilovich, 2018). Tal vez aquellos que dicen que nunca han experimentado remordimientos son conscientes de cometer errores en sus vidas, pero como Frank Sinatra, aceptan su forma imperfecta de tomar decisiones, guiados por su corazón.

La naturaleza del arrepentimiento puede cambiar con el tiempo. Por lo tanto, Jonathan, un hombre divorciado de unos cincuenta años, insiste: "Lamento no haberme casado con la mujer rica que quería casarse conmigo. No la amaba lo suficiente y no quería casarme por dinero. Hoy, creo que fue un error”. El amor contribuye enormemente a nuestra felicidad y en este sentido, Jonathan tenía razón en no casarse con esta mujer. Sin embargo, su arrepentimiento se basa en la posibilidad de que el amor cambie: el amor puede desarrollarse o desaparecer con el tiempo. En ambos casos, el dinero puede ayudar.

Por cierto, el arrepentimiento de Jonatán aumentó cuando escuchó, poco tiempo después de su separación, que la mujer con la que había considerado casarse se había enfermado y muerto, lo que significa que, si se hubiera casado con ella, habría heredado toda su fortuna. Los Beatles tenían razón al afirmar que el dinero no puede comprar el amor, pero el dinero ciertamente puede mejorar el amor o una buena vida después de que el amor ha muerto, como muchos amores lo hacen.

¿Los remordimientos tienen un valor funcional?

"Nunca cedas al remordimiento, pero de inmediato dite a ti mismo: el remordimiento simplemente significaría agregarle al primer acto de estupidez un segundo".- Friedrich Nietzsche

"¿Los remordimientos me han hecho una mujer más sabia, o han disminuido las posibilidades de cometer errores en el futuro? Ojalá pudiera decirlo. Sin embargo, necesito practicar un poco de autocompasión en lugar de enredarme en la vergüenza".- Omer

"La mayoría de mis amigos lamentan divorciarse de aquellos con quienes se casaron a una edad temprana. Un pariente mío se divorció, se volvió a casar, y a la edad de 70 años se divorció de nuevo y se volvió a casar con su primera esposa, que se divorció de su entonces pareja por él también”. —Nathan

El arrepentimiento influye en nuestro comportamiento incluso antes de tomar medidas. La mayoría de las personas tiende a tomar decisiones que disminuyen los riesgos y los arrepentimientos consiguientes. Un ejemplo de esto podría ser no casarte con tu amante después de un breve período de citas o invertir tiempo y esfuerzo en una oportunidad emocionante y prometedora. Sin embargo, la investigación sobre los remordimientos sexuales a corto plazo ha demostrado que las personas que se arrepienten del sexo casual no necesariamente dejan de tener este tipo de relaciones sexuales en los siguientes cuatro meses. El arrepentimiento es valioso para el autoconocimiento, pero su impacto en el comportamiento es limitado (Kennair et al., 2021; véase también Ludden aqui).

Los estudios sobre la felicidad indican que moderar los eventos de vida singulares moderados tiende a afectar la felicidad a corto plazo, pero las personas a menudo se adaptan al cambio. En el caso de divorcio, la satisfacción con la vida primero cae, luego aumenta y permanece alta. Y en el caso de matrimonio, la satisfacción con la vida aumenta antes, y se desvanece después de la boda. La adaptación es una característica importante del bienestar.

Parece entonces que Nietzsche tenía razón cuando redujo el valor del arrepentimiento, afirmando que debes amar tu destino con sus consecuencias buenas y malas. Para Nietzsche, la vida sin arrepentimiento no implica necesariamente considerar el futuro en la forma hedonista de comer, beber y disfrutar de cada momento en caso de muerte súbita. Más bien, aboga por aceptar el pasado como inmutable, mientras que al mismo tiempo somos felices con nuestra suerte. Tal felicidad no significa pasividad y falta de deseo de mejorar la propia vida, sino más bien continuar desarrollando y mejorando las circunstancias positivas existentes.

Comportarse de acuerdo solamente con los impulsos emocionales puede ser riesgoso al no tomar en cuenta consideraciones más generales. Sin embargo, dar más peso a su corazón y mucho menos peso a lo que otros sienten y desean es óptimo en muchas circunstancias. No creo que debamos impedir la actitud natural del arrepentimiento, pero el arrepentimiento no debe ser un factor significativo en la determinación de nuestras actividades. Aunque los remordimientos son casi inevitables, debemos evitar los remordimientos crónicos que nos obligan a vivir en el pasado y no en el presente.

En estos días, los amantes se enfrentan a múltiples desafíos. No solo dudan en qué dirección ir, sino que también lamentan los caminos no tomados. La abundancia de oportunidades románticas y la posibilidad de conseguir algo "mejor" erosionan el compromiso. Tal abundancia se convierte en un poder tiránico que impide a las personas disfrutar del presente (Ben-Ze'ev, 2019. Por lo tanto, es importante recordar lo que el gran filósofo de Chicago, Michael Jordan, dijo: "Te pierdes el 100 por ciento de los tiros que no haces”.

La gente tiende a lamentar acciones específicas a corto plazo y oportunidades perdidas a largo plazo.

Reflexionar sobre los arrepentimientos puede ser valioso para el autoconocimiento, pero generalmente no cambia el comportamiento de las personas en el futuro.

La abundancia de oportunidades románticas hoy en día a veces lleva a las personas a sentirse arrepentidas y no disfrutar del presente.