Skip to main content

Verificado por Psychology Today

Relaciones

Cómo saber si tu relación es tóxica

Puede resultar complicado identificar una relación no saludable.

Una relación tóxica se refiere a una relación que no es saludable, dañina y perjudicial para el bienestar de una o ambas partes involucradas. Se caracteriza por dinámicas negativas, patrones de comportamiento y toxicidad emocional que pueden erosionar gradualmente el sentido del ser, la autoestima y la felicidad general de los individuos.

En una relación tóxica, puede haber falta de respeto, confianza y comunicación abierta. A menudo implica comportamientos como control, manipulación, crítica constante, abuso físico o emocional y una presencia persistente de negatividad. Estos comportamientos tóxicos pueden provocar sentimientos de impotencia, desconexión y pérdida de la propia identidad.

Lo que hace que las relaciones tóxicas sean particularmente peligrosas es que a veces pueden pasar desapercibidas o racionalizarse como algo normal. La toxicidad puede ser sutil e intensificarse lentamente con el tiempo, lo que dificulta reconocer los efectos nocivos que alguien tiene sobre el bienestar emocional y mental.

Reconocer las señales de una relación tóxica es crucial para tu bienestar. Aquí hay algunos indicadores a tener en cuenta:

1. Pérdida del yo: Un indicador clave es si sientes que te estás perdiendo a ti en la relación. ¿Ya no te gustas ni te respetas? ¿Te sientes invisible, impotente o desconectado de quién eres realmente? Estos sentimientos podrían ser el resultado de la toxicidad de la relación. Por ejemplo, si tu pareja te menosprecia constantemente, menosprecia tus logros o socava tu confianza, esto puede erosionar gradualmente tu sentido de identidad. Puedes comenzar a dudar de tus habilidades, cuestionar tu valor y perder de vista tus propias fortalezas y valores. Esta desconexión de tu verdadero yo puede hacerte sentir invisible, impotente y como si estuvieras perdiendo una parte de quién eres. Otro ejemplo de pérdida del sentido de identidad en una relación es cuando tus intereses, valores y crecimiento personal pasan a un segundo plano y priorizas las necesidades de tu pareja sobre las tuyas.

2. Manipulación y control sutiles: El control sin darnos cuenta, la difamación sutil, el comportamiento pasivo-agresivo y nunca responsabilizarse también son comportamientos tóxicos comunes. Es posible que estas acciones no sean obvias al principio, pero poco a poco pueden erosionar los cimientos de una relación.

3. Negatividad persistente: Si tu pareja aporta constantemente negatividad a la relación, como críticas constantes, pesimismo o falta de apoyo, puede afectar tu bienestar emocional. Con el tiempo, esta negatividad puede afectar tu autoestima y contribuir a una dinámica tóxica. Mira, todos tenemos días malos, pero si tu pareja te deprime constantemente y no se esfuerza por encontrar el lado positivo, la relación puede volverse tóxica. La negatividad puede ser pesada e injusta de llevar y, con el tiempo, puede dañarte tanto a ti como a la relación. Si tu pareja te deprime, te critica o crea un ambiente hostil constantemente, puede tener un impacto profundo en tu bienestar emocional. Con el tiempo, esta negatividad puede filtrarse en tus propios pensamientos y creencias, distorsionando tu percepción de ti y del mundo que te rodea. Se vuelve más difícil reconocer el propio valor y mantener un sentido positivo del yo.

4. Celos y deseo de posesión: Los celos pueden ser más que simplemente revisar el teléfono de la otra persona o exigir saber su paradero. También puede manifestarse como mucha energía, pucheros o comportamiento pasivo-agresivo. Estos sutiles signos de celos pueden crear tensión y desconfianza en la relación.

5. Sentirse atrapado o distanciarse: Las relaciones tóxicas pueden hacerte sentir atrapado o dejarte con una sensación de desconexión. Es posible que sientas que te estás alejando de tu verdadero yo o que no estás creciendo como persona. Esta sensación de estancamiento y falta de realización puede ser una señal de toxicidad.

6. Tu crecimiento personal está estancado. Las relaciones tóxicas también pueden obstaculizar tu crecimiento personal. Si tu pareja es controladora, manipuladora o desdeñosa con sus metas y aspiraciones, puede obstaculizar tu progreso e impedirte perseguir tus pasiones. Es posible que te encuentres comprometiendo tus sueños o sacrificando tu propia felicidad para complacer a tu pareja, desconectándote aún más de tu yo auténtico.

Si reconoces estos signos en tu relación, es importante tener conversaciones honestas con tu pareja o considerar cambiar tu propio comportamiento. No se trata de arrepentirse o sentir pánico, sino más bien de agudizar tu conciencia y explorar tus opciones para una relación más sana y satisfactoria.

Da un paso atrás y reflexiona sobre la dinámica de tu relación. ¿Sientes que estás rompiendo contigo? ¿Te estás alejando de quién eres realmente? Evaluar tus propios sentimientos y asumir la responsabilidad de tu propia felicidad es fundamental. Recuerda, eres el 50% de la relación y comprender tu propio papel es esencial para determinar si la relación es tóxica.

Es posible que estas señales no siempre sean obvias, pero ser consciente de ellas es esencial. Si notas estos patrones en tu relación, es importante tener conversaciones abiertas y honestas con tu pareja o buscar ayuda profesional. Tu bienestar y felicidad siempre deben ser una prioridad.

A version of this article originally appeared in Inglés.

publicidad
Acerca de
John Kim LMFT

John Kim, Terapeuta Familiar y de Matrimonios con Licencia, es pionero en un movimiento de coaching en línea llamado Lumia Coaching cuando empezó a trabajar de formas no convencionales. Continúa manejando su motocicleta a sesiones por Los Angeles, encontrarse con clientes en cafeterías, gimnasios o paseos en montaña. Es un autor de best-seller y conferencista.

Más de John Kim LMFT
Más de Psychology Today
Más de John Kim LMFT
Más de Psychology Today