¿Las publicaciones en redes son advertencias de suicidio?

Si bien las tasas generales de suicidio para los grupos de edad más jóvenes han disminuido en el último año, las tasas de suicidio de 2022 para personas de 35 años o más han aumentado (Curtin et al., 2023). Los mayores aumentos porcentuales generales se dan entre las personas de 55 a 64 años y los mayores de 75 años. Los hombres tienen muchas más probabilidades de suicidarse que las mujeres; de hecho, los hombres tienen cuatro veces más probabilidades de morir por suicidio que las mujeres. Los hombres solteros y desempleados tienen mayor riesgo de suicidio. Al explorar las razones por las que los hombres se quitan la vida, los factores identificados incluyen divorcio, pérdida o ausencia del trabajo, enfermedades graves, abuso de sustancias, factores estresantes financieros y otros factores estresantes/transiciones importantes en la vida (Fowler et al., 2022).

Tratar de manejar factores estresantes importantes puede afectar significativamente el bienestar emocional, el equilibrio y la salud física de una persona. En un estudio de veteranos adultos mayores, se descubrió que la fragilidad era el mayor predictor de suicidio (Kuffel et al., 2023). Los autores señalan que la fragilidad física se asocia frecuentemente con una menor resiliencia emocional, lo que puede resultar en una mayor probabilidad de intentos de suicidio. Debido a que los hombres tienen más probabilidades de utilizar medios más letales para suicidarse, es más probable que mueran en un intento.

Según la SAMHSA, casi el doble de mujeres que hombres buscan terapia. Esta también es probablemente la razón por la que las mujeres tienen más probabilidades que los hombres de ser diagnosticadas con un trastorno de salud mental. Las mujeres buscan ayuda, pero también intentan suicidarse con más frecuencia que los hombres. Sin embargo, sus intentos son menos letales y han sido considerados señales de socorro de emergencia, pausas parasuicidas o gestos suicidas (Freeman et al., 2017). Los hombres pueden ver el suicidio como una solución independiente a su angustia en lugar de hacer un esfuerzo por buscar una solución con la ayuda de profesionales. Independientemente del género, los pensamientos e intentos suicidas pueden ser más comunes cuando están presentes sentimientos de falta de importancia o no importancia en absoluto..

¿Importar o no importar?

Al reconocer que la importancia, como constructo, describe el apego a los demás, Flett et al. (2022) desarrollaron una escala que evaluaba el sentimiento de una persona alejada e insignificante para los demás. Observaron que las personas que “no importan” para los demás exhibirán una autoestima negativa a diferencia de aquellos que creen que sí importan para los demás. Las cinco preguntas de esta escala exploran creencias sobre cuánto sienten que les importan a los demás; si a los demás les importa lo que tienen para compartir; y sentimientos de insignificancia e invisibilidad. Las personas que obtienen una puntuación alta en la escala de no importancia también desean evitar interacciones desagradables o adversas con los demás.

En un estudio que exploró publicaciones en línea de un sitio de vigilancia de suicidios, el constructo no importancia se abordó en el 70% de las más de quinientas mil publicaciones analizadas (Deas et al., 2023). Si bien los autores no creen que la no importancia en sí misma sea un predictor de suicidio, señalaron que puede experimentarse en combinación con otros factores que exacerban la incidencia de ideación suicida, como lo hizo Flett.

Estos otros factores incluían la soledad, estrés por los demás, lástima, hablar en absolutos (todo o nada), salud mental y factores estresantes actuales, pérdida y desesperanza. Cuando sientes que estás solo, que a nadie le importa lo que sientes, piensas o haces, y los factores estresantes se acumulan, puedes sentir que no hay soluciones. Entonces es cuando tu próximo paso debería ser buscar apoyo para descubrir cómo afrontar más eficazmente los desafíos que enfrentas.

Poniendo todo en línea

En otro estudio que analizó publicaciones en línea, Ophir et al. (2020) descubrieron algo que podría parecer inesperado. Las personas que realmente corrían riesgo de suicidio no utilizaron palabras relacionadas con el suicidio en sus publicaciones. En lugar de mencionar palabras relacionadas con la muerte, sus publicaciones incluían con mayor frecuencia palabras con carga negativa, incluidas malas palabras; palabras que describen angustia emocional y palabras que describen enfermedades y dolores físicos.

Hazle saber a los demás que son importantes y escucha lo que dicen

Mantente alerta a cualquier cambio en el vocabulario y la intensidad de los sentimientos de un amigo o ser querido cuando esté lidiando con sentimientos de desesperación o depresión. Si sus palabras indican una sensación de impotencia o de que no hay solución para sus problemas actuales, anímalos a buscar ayuda de profesionales capacitados. Todos enviamos señales de nuestro estado de ánimo, pero a veces pueden ser más significativas de lo que pensamos en un principio.

• Si tú o un ser querido están contemplando el suicidio, contacta a la línea de ayuda en tu localidad y busca ayuda profesional.