Alcoholismo
La verdad sobre los beneficios para la salud del alcohol
Una nueva investigación pone en tela de juicio creencias arraigadas sobre las ventajas de beber.
15 de agosto de 2024 Revisado por Margaret Foley
Los puntos clave
- Científicos y médicos llevan mucho debatiendo sobre los beneficios para la salud por el consumo de alcohol.
- Un estudio mundial arroja luz sobre la relación entre el consumo de alcohol y las enfermedades crónicas.
- Los resultados cuestionan que el consumo de alcohol tenga beneficios para la salud en menores de 40 años.
Aunque durante décadas se creyó ampliamente que el consumo moderado de alcohol tiene beneficios para la salud, no todos los que beben experimentan beneficios para la salud. Según el estudio más grande que evaluó la relación entre el consumo de alcohol y las enfermedades crónicas, en el que participaron más de mil millones de personas de todo el mundo, la seguridad y los posibles beneficios de beber alcohol dependen en gran medida de la edad. Este estudio innovador descubrió que beber no tiene beneficios para la salud entre las personas menores de 40 años. Este grupo más joven no solo es susceptible a los riesgos y daños para la salud relacionados con el consumo de alcohol (incluidos los accidentes automovilísticos, las lesiones y los suicidios relacionados con el consumo), sino que el consumo de alcohol no benefició su salud ni redujo su riesgo de enfermedades crónicas.
¿Qué hay de aquellos mayores de 40 años?
- Las personas mayores de 40 años pueden experimentar beneficios para la salud a partir del consumo de alcohol, como una reducción del riesgo de enfermedades cardiovasculares, accidentes cerebrovasculares y diabetes.
- Se observó una reducción del riesgo de estas enfermedades crónicas entre las personas sin problemas de salud subyacentes.
- Estos beneficios están relacionados con el consumo de una cantidad limitada de alcohol (es decir, no más de una o dos bebidas estándar por día).
¿Qué deben tener en cuenta las personas que beben para mantenerse en la zona “saludable”?
- Los posibles beneficios para la salud que supone beber cantidades pequeñas o moderadas de alcohol para determinadas personas no solo desaparecen si una persona que bebe moderadamente pasa a beber en exceso, sino que se ven reemplazados por diversos riesgos potenciales para la salud.
- Los riesgos para la salud de quienes beben en exceso pueden incluir presión arterial alta, enfermedad hepática y el desarrollo de adicción.
- Las cantidades limitadas de consumo de alcohol que pueden estar vinculadas a los beneficios para la salud de determinadas personas mayores de 40 años son pautas “diarias” y no se aplican de forma acumulativa (es decir, “ahorrar” el equivalente a cuatro días de bebidas diarias y beberlas todas en un día se considera consumo excesivo de alcohol con posibles riesgos para la salud en lugar de beneficios).
Si tú o alguien que conoces bebe alcohol, es importante tener intención de consumir la cantidad y saber qué se considera un consumo excesivo o riesgoso.
¿Cuánto es demasiado?
- El consumo excesivo de alcohol se considera el consumo de más de tres bebidas en un día en el caso de las mujeres o más de cuatro en el caso de los hombres.
- El consumo problemático de alcohol se define no solo por la cantidad de alcohol que consume una persona, sino también por la capacidad de la misma para controlar su consumo.
- Cuando una persona pierde el control sobre su consumo de alcohol, puede que con frecuencia: beba más de lo que tenía previsto, se imponga reglas sobre la cantidad o la frecuencia con la que beberá, pero tenga problemas para cumplirlas, experimente síntomas de abstinencia cuando los efectos del alcohol desaparezcan, tenga problemas en relaciones importantes o para cumplir con responsabilidades debido a su consumo de alcohol, experimente antojos y/o continúe bebiendo a pesar de algunos de estos problemas.
Si tú o alguien que conoces tiene problemas controlando su consumo de alcohol puedes encontrar a un experto cerca de ti en el Directorio de Psychology Today
A version of this article originally appeared in English.